


Capítulo 81.
Billy y Valeria habían salido bastante molestos de aquella casa, él sabía perfectamente que su hermano tenía todas las posibilidades para quedarse con la herencia de los 20, y eso para nada les convenía, Ema estaba de su lado, pero eso de nada serviría al momento de tener que repartir los niños, pues seguramente, Gregory establecería en su testamento quién sería su único heredero.
—tu hermano y esa oportunista serán los únicos beneficiados con el enfrentamiento que tienes con tu padre —dijo Valeria bastante indignada.
—¿Pretendes que le pida perdón después de todas las humillaciones que me hizo?, Eso no lo haré, ni por todo el dinero del mundo, así que deja de decir tonterías —contestó Billy.
—la fortuna de los Baker lo vale, así que déjate de sentimentalismos tontos —lo reprendió su mujer.
—Bájate del coche, quiero Estar solo, tú nunca me entiendes, tan sólo te interesa el dinero de mi familia, pero nunca Me por un momento te has puesto en mi lugar, a mí sólo me ves como un cajero automático —le dijo con bastante rencor.
Valeria frunció el ceño , sabía que Billy le estaba diciendo totalmente la verdad, pero a ella no le importaba en lo absoluto, ya que en efecto, su ambición era mucho más fuerte que cualquier otra cosa, pero para nada le convenía enemistarse con su marido, así que era mejor seguirle la corriente y fingir que lo entendía.
—entiendo cómo te sientes, cariño, pero entiende que yo lo único que quiero es velar por tu futuro y por el de nuestra familia —mintió.
—por favor, no creo una sola de tus palabras, hace mucho que perdí la confianza en ti, y ahora lárgate que quiero estar solo —sentenció.
Billy la empujó bruscamente del coche, cerró la puerta e inmediatamente se fue a toda velocidad, seguramente iría a refugiarse en algún club nocturno y en los brazos de alguna mujer con las que acostumbraba a relacionarse.
Por otro lado, Valeria entró echa una fiera a casa, y de inmediato tomó su celular para comunicarse con Diana, quería a como diera lugar separar a Helena de su cuñado, necesitaba que ellos fueran tan infelices como ella lo estaba siendo.
—qué bueno que me contestas, Diana, necesito que planeemos la forma de separar a ésa maldita mujer de mi cuñado —anunció con un profundo odio.
—te ves muy afectada, Valeria, cuéntame qué sucedió —contestó Diana.
—esa maldita quiere quedarse con todo, y no pienso permitírselo, llevo muchos años dentro de esta familia y no voy a dejar que ella lo arruine todo —.
—por supuesto que no lo conseguirá, ha llegado el momento de unirnos, existen otras personas que también están interesadas en el mismo propósito, así que hagamos un frente para deshacernos de una buena vez de esa mujerzuela—.
—entonces pon la fecha y lugar, y ahí estaré, encantada de ayudarlos en todo lo que sea necesario para conseguir nuestro objetivo —responde Valeria dispuesta a unirse a esa terrible conspiración.
Lo que les espera a Maximilien y Helena será muy fuerte, tienen muchos enemigos, personas que están dispuestas a todo con tal de estropear su dicha, pero la fuerza de su amor es tan grande, que será una batalla campal para defender por lo que tanto han luchado. esta noche habían decidido continuar la velada en un hermoso lugar, se trataba de un restaurante muy lindo donde casualmente coincidieron con Karen y Michael, quienes se alegraron muchísimo de verlos.
—pero por Dios, si son nuestros amigos, esperemos que no haya sucedido nada malo, aunque con esa familia nunca se sabe —pronunció Karen.
—Maximilien estaba un poco inseguro sobre la cena en casa de su familia, al parecer ellos no ven con buenos ojos a Helena —dijo .
—Así es, cariño, esa gente siempre la ha despreciado, sólo porque ella no es una mujer de abolengo, una dama de la alta sociedad, pero lo que son las cosas, los Adams son una familia mucho más prominente que los Baker, y Helena es la futura heredera de todo aquello—.
—a ninguno de ellos le importa nada de eso, se vea kilómetros cuánto se aman —.
—tienes razón, el amor de ellos es tan grande que ha superado todas las pruebas, no te imaginas como sufrían los dos cuando estaban separados —enfatizó.
En cuánto se percatan de la presencia de Karen y Michael, Helena y Maximilien se acercaron para saludarlos.
—hola chicos —pronunció Helena con una sonrisa cálida en sus labios.
—que sorpresa, pensamos qué se quedarían más tiempo por allá en casa de tu familia política amiga —respondió Karen.
—ya los conoces, no son muy hospitalarios que digamos —intervino Maximilien.
—Vengan a sentarse con nosotros, estoy seguro que la pasaremos genial todos juntos —señaló Michael.
La noche transcurría con toda naturalidad, entre risas, alegría y conversaciones, las dos parejas sentían mucha afinidad, y además tenían grandes proyectos en común, y eso hacía mucho más sólida esa amistad. todo parecía marchar a la perfección, cuando de pronto un amigo se acerca, se trataba de un joven empresario que siempre fue uno de los principales competidores de Maximilien, cuando estaban juntos en la universidad, Cris siempre quería ir tras todo lo que él tenía. Maximilien se percató de su presencia y rápidamente la expresión en su rostro cambió.
—no puede ser, lo que me faltaba —pensó.
No hacía falta mucho para que Helena se diera cuenta de qué algo había incomodado a Maximilien, así que no tardo en preguntarle.
—¿Qué sucede cariño? —Cuestionó ella.
—ya te vas a enterar —dijo secamente.
El joven se acercó, estaba rodeado de guardaespaldas quienes lo cuidaban minuciosamente, se levantó de una de las mesas de un reservado y camina hacia donde se encontraban ellos.
—pero mira nada más a quien tenemos aquí, nada más y nada menos que al empresario del año —soltó de repente.
—aunque lo digas de broma, te recuerdo que ese premio ha sido mío durante tres años consecutivos —contestó el.
—qué bueno que lo tienes presente, porque ese reinado está a punto de terminar, la celebración se acerca, Baker —le dijo el joven con algo de ironía en su voz.
—espero que hayas preparado muy bien tu exposición para intentar ganarme, aunque te anticipo que no será fácil —enfatizó.
—no me gustan las cosas fáciles, pero creo que el que debe prepararse eres tú, porque esta vez no seré tan benevolente contigo —.
¿Pero no me vas a presentar a la belleza que te acompaña? —.
—pues si no hay más remedio —pensó con una mueca dibujada en su rostro.
—ella es Eliza, mi pareja y la futura madre de mis tres hijos —señaló Maximilien.
—Encantado de conocerte, Helena, mi amigo sigue teniendo un gusto exquisito con las mujeres —le dijo mirando la de arriba a abajo.
—mucho gusto —contesta un tanto incómoda mientras le estrechaba la mano.
Cris sostenía de una manera prolongada la mano de Helena , y por supuesto que eso a Maximilien le incomodó bastante, y no dudo en hacérselo saber.
—te presento también a Karen y Michael, nuestros grandes amigos, chicos, él es, Cris, un viejo conocido —dijo a propósito mientras retiraba Bruscamente la mano de su mujer.
Cris se dio cuenta del episodio y volteo a verlo soltando una risita irónica.
—Es un placer conocerlos, chicos, espero que no les importe que me siente con ustedes —exclamó.
—por lo que veo ya estabas acompañado, deberías regresar con las chicas que vienen contigo —sugirió Maximilien.
—eso no tiene importancia, a ellas puedo verlas en otra ocasión, en cambio a los viejos amigos no es muy frecuente encontrarlos —contesta con toda intención.
Maximilien estaba muerto del coraje, Cris siempre le había provocado mucha desconfianza, y sobre todo le molestaba la forma en la que estaba mirando a Helena , sin importarle que ella estuviese embarazada y que se tratara de su mujer, por lo que no le despegaba los ojos de encima pero en ese momento no quería provocar un escándalo y era preferible quedarse, pero por supuesto, estar muy alerta para reaccionar ante el menor de los contratiempos que podrían surgir en aquel desafortunado encuentro.