48 Lucas

—¡¿Qué hiciste qué?!

Traté, con todas mis fuerzas, de contener la risa que la escena me dio. Porque Jenna había decidido ser tan dramática como para dejar caer el plato de cereal que tenía en la mano, haciendo un desastre de hojuelas y yogurt.

—No te rías—espetó con seriedad—, ¡¿Es qué te has vuel...