Capítulo 46

Trescientos sesenta y cinco días se fueron volando. Ahora que veía el precioso anillo de dieciocho quilates que le regaló su ex prometido, el recuerdo le dibujó una sonrisa genuina en sus labios. Las lágrimas se terminaron. El tiempo le dio la razón, su elección había sido acertada.

Luego del innec...