CAPÍTULO 109

—Pffff— resopló.

Ella se arqueó lo suficiente para darle una vista privilegiada y a él le encantaba verla retorcerse en el asiento, incapaz de soportar la tortura de ver, pero no tocar. Se dio la vuelta de nuevo y pasó sus manos por todo su cuerpo, acariciando su piel y llegando hasta sus pechos ab...