CAPÍTULO NOVENTA «TRES»

Elisabeth.

Apoyo mi cabeza en el regazo de Alex mientras él empieza a leer algunos papeles. Ni siquiera pregunto qué es porque no entiendo nada y no es asunto mío. Los otros chicos fueron a otra reunión. Debe ser realmente malo meterse con la mafia y aún así tener una empresa tan grande. Le doy una...