CAPÍTULO NOVENTA «DOS»

Elisabeth.

Mientras terminábamos nuestro café, nos dirigimos a la empresa de los chicos.

—Oh, estoy emocionada de verlos trabajar —digo, entrelazando mis dedos con los de Alex.

—Y nosotros estamos felices de tenerte con nosotros también —él lleva mi mano a su boca y la besa—. Te ves hermosa con e...