

Mi Hijo Es Suyo Jefe
DaysyEscritora · Completado · 118.6k Palabras
Introducción
Capítulo 1
Siento crecer la urgencia por salir de aquí, no quiero ser vista por él, no quiero que descubra quién soy en realidad. Dios mío, me siento atrapada en esta escena. Aún no puedo creer que se trate de él, es increíble que sea Zared. No me lo puedo creer. He pasado la noche con él. ¿Por qué las cosas tienen que ser así? Miro mi muñeca y veo esa pulsera. Quien me la dio está a pocos centímetros de mí. Todo esto parece tan irreal.
Necesito irme de aquí rápidamente, no quiero que se despierte y se dé cuenta de quién soy. Además, todo esto será un desastre... Me siento tan perdida que no encuentro mi ropa. Lo único de lo que estoy segura es de que está en algún lugar de esta zona.
Me muevo con cautela, tratando de no hacer ruido que lo despierte. Afortunadamente, aún no lo ha hecho, pero no puedo bajar la guardia, ya que en cualquier momento podría abrir los ojos y encontrarme allí. Me muero de vergüenza, el arrepentimiento se adentra en mi cuerpo como una víbora... y sé que lo merezco, porque soy la culpable de todo esto.
No puedo creer que haya sido capaz de hacer esto. No es algo de lo que me sienta orgullosa, de hecho, me avergüenzo profundamente. Me arrepiento de haber caído tan bajo, de acostarme con la primera persona que se cruzó en mi camino, aunque sea alguien a quien conocí hace tanto tiempo.
¿El recuerda quién soy? No creo que me reconozca. Entonces, ¿por qué permitió que esto sucediera? No recuerdo que estuviera borracho.
Pero en este momento, no estoy segura de nada. No puedo recordar con claridad. Lo miro nuevamente antes de empezar a ponerme la ropa que encontré tirada por todas partes. Mientras me visto, sigo vigilando para asegurarme de que no se despierte y me descubra. No quiero que me encuentre.
Sin embargo, eso podría ocurrir en cualquier momento. Sé que Zared podría abrir los ojos y verme allí. No sabría cómo reaccionar, no encontraría las palabras adecuadas para explicarle.
Cuando finalmente estoy lista, sé que debo irme de aquí rápidamente, pero algo me detiene y decido quedarme un poco más para observarlo. Es un hombre realmente apuesto, debo admitirlo. Su atractivo podría ser la perdición de cualquier mujer, incluyéndome a mí.
...
Claramente, al no ser mi casa, me encuentro perdida. Es difícil orientarme en este lugar y encontrar la salida. La casa es enorme y el lujo se ve por todas partes. Puedo ver objetos valiosos en cada paso que doy, pero no tengo tiempo para admirarlos.
Apuesto a que será la última vez que esté aquí. Intentaré no volver a encontrarme con Zared. A partir de ahora, me volveré un poco paranoica, pensando que podré encontrármelo en cualquier lugar de forma repentina. Prefiero creer que todo esto ha sido una simple coincidencia y que no se repetirá en el futuro. Haré todo lo posible para asegurarlo yo misma.
Suspiro profundamente.
"No llores, no llores", me digo a mí misma.
En este momento, el arrepentimiento no deja de crecer. Me siento atrapada en él, después de darme cuenta de que fui yo quien se acercó a él, quien lo besó y le dijo que no se detuviera. Me tapo la boca, sorprendida. Fui yo quien empujó todo esto. ¿Cómo pude ser tan atrevida? Solo fue una versión de mí misma bajo los efectos del alcohol. No me reconozco en esa persona y no quiero volver a ser así.
Siento cómo mi corazón late aceleradamente al recordar cada instante vivido. Me derrumbo en medio del arrepentimiento, pero hay una parte de mí que añora todo lo vivido.
No puedo creerlo. Niego con la cabeza una y otra vez, tratando de sacar esas imágenes de mi mente que me perturban y me sonrojan al mismo tiempo. Mi rostro arde por la intensidad del calor.
¿Por qué tuve que vivir esto? No debí ser tan atrevida. No puedo volver atrás, solo puedo aceptar lo sucedido. Y eso cambia todo.
Absolutamente todo.
Horas después...
Sol, mi amiga, está al otro lado de la línea.
Estoy sentada al borde de la cama, escuchando atentamente mientras ella me cuenta lo que está pasando. Su voz quebrada y las lágrimas evidencian su tristeza. No puedo evitar sentirme mal, ya que parecía que su relación con Alexander iba viento en popa. Pero ahora parece que todo se está desmoronando. Tal vez sea solo una crisis pasajera y puedan solucionarlo, o tal vez sea el principio del fin. No lo sé.
Aunque también me siento inestable en este momento, la escucho y la apoyo. Sol mencionó que pensó en mí como una de las primeras personas a quien llamar para desahogarse. Aunque nunca he tenido una relación, creo poder comprender un poco de lo que está pasando. Sin embargo, no sé muy bien cómo puedo ayudarla.
No tengo idea.
"—... Creo que es un imbécil, no debería casarme con él. He estado reflexionando mucho sobre la decisión de unir nuestras vidas y no creo que sea conveniente si él pone el trabajo por encima de nuestra relación. No quiero ni imaginar cómo será en el futuro, pero lo amo de una manera muy profunda. Anoche fue horrible, intenté resolver las cosas, pero es imposible cuando el desacuerdo persiste. Odio que siempre quiera tener la razón y priorice su trabajo. Necesito que también se preocupe por nuestra relación".
—Así que te preocupa que una vez que te cases, él te deje de prestar atención y todo se trate solo de su trabajo —repito, intentando comprender mejor.
—Exactamente. Su atención hacia mí ha disminuido lentamente en todo este tiempo, así que estoy segura de que empeorará una vez que nos casemos. Hemos decidido tomar distancia por ahora, pero no está claro si esto significa el fin de nuestra relación. Quiero creer que esto es solo una mala racha que pasaremos juntos.
Suspira con pesar.
—Y si te digo que necesito hablar con él cuando las cosas estén más tranquilas, sin que ninguno de los dos esté alterado... ¿crees que eso podría ayudar? —sugiero.
—Lo sé, ya buscaremos la forma de hablar adecuadamente. Sé que es importante... Por ahora solo necesito un poco de tiempo para estar sola y reflexionar. Debo evitar que las cosas empeoren si nos volvemos a ver. Oye, muchas gracias por tus palabras y por estar aquí para mí.
—No hay de qué. Estoy aquí para escucharte y apoyarte. Si necesitas hablar con alguien para desahogarte, siempre puedes contar conmigo. Espero que todo se solucione entre Alexander y tú. Realmente los veo como una linda pareja, sería triste que se separen completamente. A veces solo es cuestión de tiempo, paciencia y comprensión. Permítele a las cosas calmarse y verás que todo se resolverá. Cuídate. Nos vemos... —y en ese momento recuerdo que también me despidieron de mi trabajo—. Por cierto, aún no te conté que me despidieron del trabajo.
La reacción de Sol no se hace esperar y suelta un grito a través del teléfono. Debería haber sabido que reaccionaría así, porque es su personalidad.
—Oh no, por favor dime que estás bromeando. No puedo creer que te hayan despedido, eso es imposible. Sé que te habían llamado la atención por llegar tarde, pero aún no habías acumulado las tres faltas. ¿Por qué estás jugando conmigo? —se queja.
—Al igual que tú, desearía que esto fuera una broma, pero te digo sinceramente que me despidieron y estoy segura de que Mara tuvo algo que ver. Mi jefe me llamó a su oficina y me hizo abrir mi mochila frente a él. Encontró ropa de la tienda allí y me acusó de ser una ladrona. Cuando intenté defenderme y le pedí que revisara las cámaras de seguridad, se negó. Es completamente injusto y todo apunta a que sabía que era inocente y aún así participó en esto... me parece tan familiar.
—¡Te lo dije! Mara y él tienen algo, no es descabellado pensar eso. Si ella tiene que ver con este despido, significa que también participó en todo. Son unos desgraciados, ambos lo son.
—Dios mío, voy a llamar y reclamarle por lo sucedido. Además, presentaré mi renuncia. No pienso seguir trabajando en un lugar donde pueden despedirme injustamente y correr el riesgo de que me acusen de algo que no hice.
Últimos capítulos
#117 117 Epílogo
Última actualización: 12/31/2024#116 116 Final
Última actualización: 12/31/2024#115 115
Última actualización: 12/31/2024#114 114
Última actualización: 12/31/2024#113 113
Última actualización: 12/31/2024#112 112
Última actualización: 12/31/2024#111 111
Última actualización: 12/31/2024#110 110
Última actualización: 12/31/2024#109 109
Última actualización: 12/31/2024#108 108
Última actualización: 12/31/2024
Te podría gustar 😍
Empezar de Nuevo
© 2020-2021 Val Sims. Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta novela puede reproducirse, distribuirse o transmitirse de ninguna forma ni por ningún medio, incluidas las fotocopias, la grabación u otros métodos electrónicos o mecánicos, sin el permiso previo por escrito del autor y los editores.
La Cachorra del Príncipe Licántropo
—Pronto estarás rogándome. Y cuando lo hagas—te usaré como me plazca, y luego te rechazaré.
—
Cuando Violet Hastings comienza su primer año en la Academia de Cambiantes Starlight, solo quiere dos cosas: honrar el legado de su madre convirtiéndose en una sanadora hábil para su manada y pasar por la academia sin que nadie la llame rara por su extraña condición ocular.
Las cosas toman un giro dramático cuando descubre que Kylan, el arrogante heredero al trono de los Licántropos que ha hecho su vida miserable desde el momento en que se conocieron, es su compañero.
Kylan, conocido por su personalidad fría y sus maneras crueles, está lejos de estar contento. Se niega a aceptar a Violet como su compañera, pero tampoco quiere rechazarla. En cambio, la ve como su cachorrita y está decidido a hacer su vida aún más un infierno.
Como si lidiar con el tormento de Kylan no fuera suficiente, Violet comienza a descubrir secretos sobre su pasado que cambian todo lo que pensaba que sabía. ¿De dónde viene realmente? ¿Cuál es el secreto detrás de sus ojos? ¿Y ha sido toda su vida una mentira?
Luna de ojos esmeralda
Reclamada por los Mejores Amigos de mi Hermano
La Compañera Humana del Rey Alfa
«Te he esperado nueve años. Ha pasado casi una década desde que sentí este vacío dentro de mí. Una parte de mí empezó a preguntarse si no existías o si ya habías muerto. Y luego te encontré, justo dentro de mi propia casa».
Usó una de sus manos para acariciarme la mejilla y sentí un hormigueo por todas partes.
«He pasado suficiente tiempo sin ti y no permitiré que nada más nos separe. Ni a otros lobos, ni a mi padre borracho, que apenas se ha mantenido firme en los últimos veinte años, ni a tu familia, ni siquiera a ti».
Clark Bellevue ha pasado toda su vida siendo la única humana de la manada de lobos, literalmente. Hace dieciocho años, Clark fue el resultado accidental de un breve romance entre uno de los alfas más poderosos del mundo y una mujer humana. A pesar de vivir con su padre y sus hermanastros hombres lobo, Clark nunca ha sentido que realmente perteneciera al mundo de los hombres lobo. Pero justo cuando Clark planea dejar el mundo de los hombres lobo para siempre, su vida se pone patas arriba por culpa de su compañero: el próximo rey alfa, Griffin Bardot. Griffin lleva años esperando la oportunidad de conocer a su pareja, y no va a dejar que se vaya pronto. No importa lo lejos que Clark intente huir de su destino o de su pareja: Griffin tiene la intención de quedarse con ella, sin importar lo que tenga que hacer o quién se interponga en su camino.
Persiguiendo a Su Luna Sin Lobo de Vuelta
Avanzó hacia mí, golpeándome con fuerza contra la pared, encerrándome con su cuerpo.
—Por favor, para, Sebastián —supliqué, pero él continuó sin piedad.
—Ni siquiera eras buena en eso. Cada vez que estaba dentro de ti, me imaginaba a Aurora. Cada vez que terminaba, era su rostro el que veía. No eras nada especial, solo fácil. Te usé como la zorra inútil sin lobo que eres.
Cerré los ojos, lágrimas calientes rodaron por mis mejillas. Me dejé caer, rompiéndome por completo.
Como la hija no deseada sin lobo de la familia Sterling, Thea ha pasado toda su vida siendo tratada como una extraña. Cuando un accidente la obliga a casarse con Sebastián Ashworth, el Alfa del clan más poderoso de Moon Bay, ella tontamente cree que el amor y la dedicación podrían ser suficientes para superar su "defecto".
Siete años después, su matrimonio termina en divorcio, dejando a Thea solo con su hijo Leo y un puesto de maestra en una escuela de territorio neutral. Justo cuando comienza a reconstruir su vida, el asesinato de su padre la devuelve al mundo del que intentó escapar. Ahora debe lidiar con el romance reavivado de su exmarido con su perfecta hermana Aurora, ataques misteriosos que la tienen como objetivo, y una atracción inesperada hacia Kane, un policía con sus propios secretos.
Pero cuando una wolfsbane experimental amenaza a ambos clanes y pone en peligro a todos los que ama, Thea se encuentra atrapada entre proteger a su hijo y confrontar un pasado que nunca entendió completamente. Ser sin lobo una vez la hizo una marginada —¿podría ahora ser la clave para su supervivencia? Y mientras Sebastián muestra un lado protector desconocido, Thea debe decidir: ¿debería confiar en el hombre que una vez la rechazó, o arriesgarlo todo abriendo su corazón a alguien nuevo?
Soy su Luna sin lobo
Ethan también emitía profundos rugidos en mi oído.
—Maldita sea... voy a correrme...!!!
Su impacto se volvió más intenso y nuestros cuerpos seguían haciendo sonidos de golpes.
—¡Por favor!! ¡Ethan!!
Como la guerrera más fuerte de mi manada, fui traicionada por aquellos en quienes más confiaba, mi hermana y mi mejor amiga. Fui drogada, violada y desterrada de mi familia y mi manada. Perdí a mi loba, mi honor y me convertí en una paria—cargando un hijo que nunca pedí.
Seis años de supervivencia ganada con esfuerzo me convirtieron en una luchadora profesional, impulsada por la rabia y el dolor. Llega una convocatoria del formidable heredero Alfa, Ethan, pidiéndome que regrese como instructora de combate sin loba para la misma manada que una vez me desterró.
Pensé que podría ignorar sus susurros y miradas, pero cuando veo los ojos verde esmeralda de Ethan—los mismos que los de mi hijo—mi mundo se tambalea.
Mimada por multimillonarios tras ser traicionada
Emily y su multimillonario esposo estaban en un matrimonio contractual; ella esperaba ganarse su amor a través del esfuerzo. Sin embargo, cuando su esposo apareció con una mujer embarazada, ella se desesperó. Después de ser expulsada, Emily, sin hogar, fue acogida por un misterioso multimillonario. ¿Quién era él? ¿Cómo conocía a Emily? Y lo que es más importante, Emily estaba embarazada.
Un manada propia
—No puede ser —dijo Elena, mirando a su abuela con incredulidad—. ¿Cómo es posible?
—Siempre lo supe, querida —respondió su abuela con una sonrisa—. Eres especial, y ahora es el momento de que aprendas a controlar tu poder.
Con la ayuda de su mejor amigo, Lucas, y su abuela, Elena comenzó a explorar sus habilidades. Pasaron horas entrenando en el bosque, lejos de las miradas curiosas de los demás.
—Intenta concentrarte, Elena —dijo Lucas, observándola con atención—. Puedes hacerlo.
Elena cerró los ojos y respiró profundamente. Sentía la energía fluir a través de su cuerpo, como un río desbordante. Poco a poco, aprendió a canalizar esa energía y a usarla a su favor.
Un día, mientras practicaban, Elena sintió una presencia extraña. Abrió los ojos y vio a un joven observándola desde la distancia. Sus miradas se cruzaron y sintió una conexión instantánea.
—¿Quién es él? —preguntó Elena, sin apartar la vista del desconocido.
—Es tu compañero destinado —respondió su abuela con una sonrisa—. Juntos, formarán su propia manada.
Elena no podía creer lo que estaba escuchando. Pero a medida que pasaban los días, se dio cuenta de que su abuela tenía razón. Con su nuevo compañero a su lado, se sentía más fuerte y segura que nunca.
Juntos, Elena y su compañero comenzaron a reunir a otros híbridos y lobos solitarios, formando una manada unida y poderosa. A pesar de los desafíos y las dificultades, Elena finalmente encontró su lugar en el mundo, rodeada de aquellos que la amaban y la apoyaban.
SU PAREJA DE SEGUNDA OPORTUNIDAD RECHAZADA
—¡¿Qué demonios, Zara?!— Levi chocó conmigo y gruñó detrás de mí.
—Lo siento— murmuré, con los ojos muy abiertos.
—¿Es él?— Levi me preguntó por el vínculo mental, y asentí con la cabeza.
—Zara— dijo mi padre—. Entiendo que conoces al Alfa Noah.
Asentí lentamente con la cabeza.
—Genial— dijo mi padre—. El Alfa Noah también me ha informado que eres su compañera destinada.
Asentí en respuesta.
—Estupendo, el Alfa Noah ha solicitado tu mano.
—¿En serio?— encontré mi voz.
Tanto mi padre como el Alfa Noah asintieron.
—Interesante— dije—. ¿Te dijo el Alfa Noah que me rechazó hace más de un año?
La sonrisa de mi padre vaciló mientras el rostro del Alfa Noah se tornaba pálido.
¿Realmente creía el Alfa Noah que obedecería ciegamente una orden de mi padre sin luchar?
Zara es una loba plateada descendiente de una de las manadas más poderosas del continente.
Un año después de que él la rechazara, su compañero destinado vuelve a tocar su puerta para decirle que ha regresado para reclamarla.
Zara rechaza su propuesta, y él va a escondidas y le pide su mano a su padre. El viejo Alfa acepta el arreglo.
Zara está descontenta y decide manejar las cosas por su cuenta. Informa a su padre que ha tomado un compañero elegido, su Beta y su mejor amigo, Levi—solo que él tiene un secreto.
¿Qué pasará cuando el segundo compañero destinado de Zara asista a su ceremonia de apareamiento con Levi?
¿Detendrá el evento y la reclamará como su compañera?
Una historia sobre dos corazones rotos que se encuentran y se ven atrapados en una red de mentiras y profecías.
¿Encontrará Zara la felicidad que tanto merece?
Regla número 1 - Sin Compañeros
«Déjame ir», lloriqueo, mi cuerpo tiembla de necesidad. «No quiero que me toques».
Me caigo sobre la cama y luego me doy la vuelta para mirarlo fijamente. Los tatuajes oscuros de los hombros cincelados de Domonic se estremecen y se expanden con el movimiento de su pecho. Su profunda sonrisa llena de arrogancia se extiende detrás de sí mismo para cerrar la puerta.
Mordiéndose el labio, se dirige hacia mí, con la mano pegada a la costura de sus pantalones y a la protuberancia que hay allí.
«¿Estás seguro de que no quieres que te toque?» Susurra, desatando el nudo y metiendo una mano dentro. «Porque juro por Dios que eso es todo lo que quería hacer. Todos los días, desde el momento en que entraste en nuestro bar, percibí tu sabor perfecto desde el otro lado de la habitación».
Draven, nuevo en el mundo de las palancas de cambio, es un humano que huye. Una chica hermosa a la que nadie podría proteger. Domonic es el frío alfa de la manada de lobos rojos. Una hermandad de doce lobos que viven según doce reglas. Reglas que juraron que NUNCA podrían romperse.
Especialmente, regla número uno: No hay amigos
Cuando Draven conoce a Domonic, sabe que ella es su compañera, pero Draven no tiene ni idea de lo que es una pareja, solo que se ha enamorado de un cambiaformas. Un alfa que le romperá el corazón al hacer que se vaya. Prometiéndose a sí misma que nunca lo perdonará, desaparece.
Pero no sabe nada del bebé que está embarazada ni de que, desde el momento en que se fue, Domonic decidió que las reglas estaban hechas para romperlas, ¿y ahora volverá a encontrarla? ¿Lo perdonará?
Hilos del Destino
Tengo magia, tal como mostraron las pruebas, pero nunca se ha alineado con ninguna especie mágica conocida.
No puedo respirar fuego como un Cambiante dragón, ni lanzar maldiciones a las personas que me molestan como las Brujas. No puedo hacer pociones como una Alquimista ni seducir a la gente como una Súcubo. No quiero parecer desagradecida con el poder que tengo; es interesante y todo eso, pero realmente no tiene mucho impacto y, la mayor parte del tiempo, es prácticamente inútil. Mi habilidad mágica especial es la capacidad de ver hilos del destino.
La mayor parte de la vida es lo suficientemente molesta para mí, y lo que nunca se me ocurrió es que mi pareja es un grosero y pomposo incordio. Es un Alfa y el hermano gemelo de mi amigo.
“¿Qué estás haciendo? ¡Este es mi hogar, no puedes entrar así!” Intento mantener mi voz firme, pero cuando se da la vuelta y me fija con sus ojos dorados, me echo atrás. La mirada que me lanza es imperiosa y automáticamente bajo los ojos al suelo, como es mi costumbre. Luego me obligo a mirar de nuevo hacia arriba. Él no se da cuenta de que lo estoy mirando porque ya ha desviado la mirada de mí. Está siendo grosero, me niego a mostrar que me está asustando, aunque definitivamente lo está haciendo. Echa un vistazo alrededor y, al darse cuenta de que el único lugar donde sentarse es la pequeña mesa con sus dos sillas, señala hacia ella.
“Siéntate.” me ordena. Lo miro con desprecio. ¿Quién se cree para darme órdenes así? ¿Cómo puede alguien tan obnoxioso ser mi alma gemela? Tal vez todavía estoy dormida. Me pellizco el brazo y mis ojos se humedecen un poco por el escozor del dolor.