Capítulo 49

Buenos días

Una vez más la cama estaba fría, pero esta vez no tan desolada. Cuando se fue temprano en la mañana, me besó de despedida después de abrazarme contra su pecho. Hice todo lo que pude para absorber su calor antes de que tuviera que irse.

Tenía deberes que cumplir, libros que revisar, ...