
Capítulos
1. ¿Bebe?
2. Madre de reemplazo
3. Es el mismísimo diablo
4. Desde este momento me perteneces
5. Te casarás con ella
6. Una mujer para casarme
7. Soy tu dueño
8. Quiero más...
9. Le has quitado la virginidad
10. Asumir las reglas
11. ¿Te preguntas si vamos a tener sexo?
12. Chispa en sus miradas
13. Mi sumisa
14. Tu amor...
15. Corazón herido y el alma amarga
16. Ya no tienes escapatoria
17. No quiero tener más hijos
18. Vengo a negociar
19. La heredera de mi fortuna
20. Por tu culpa
21. ¿Acaso es el divorcio?
22. Falsas ilusiones
23. Te juro que voy a regresar
24. ¿La dejaste ir?
25. Frustración
26. Privada de su libertad
27. Renunció
28. Fugitiva
29. Embarazada
30. No puedo más
31. No me vuelvas a buscar
32. Corazón roto
33. Eres una perfecta mentirosa
34. Esperaba más de tí
35. Su esposa se fué
36. REGRESA A MIS BRAZOS QUERIDA ESPOSA (2 parte de madre de reemplazo)
37. Querido esposo
38. Tu truco barato
39. ¿De nuestros hijos?
40. Cómo a un desconocido
41. Juego sucio
42. El encanto de sus palabras
43. La gota que rebozo el vaso
44. Entre ella y yo
45. Oportunista mentirosa
46. Rojo ardiente
47. Domar al don Juan
48. señor por favor, ayúdame
49. Rosas y chocolates
50. Sigo siendo tu hombre y eres mi mujer
51. James endemoniado
52. Es una advertencia
53. Una mujer millonaria
54. Ocultado su amor
55. Construir un matrimonio real
56. Adrenalina
57. Impregnar en tu piel
58. Ex prometida
59. No soportaría perderte
60. El peor error de mi vida
61. Pruebas suficientes
62. Mi vida a tu lado
63. Una segunda oportunidad
64. Revolcándose con otra
65. ¿Fotos?
66. Tomar posesión
67. El testamento
68. Jugada perfecta
69. Malas noticias
70. Se vuelve loco por mí
71. El último soy yo
72. No me pidas el divorcio
73. Infernales
74. ¿Quieres negociar?
75. Formar mi vida con él
76. Hermosa familia
77. Confesión
78. ¿No sentiste celos?
79. FINAL

Alejar

Acercar
¿No sentiste celos?
—James, lo prometiste— Charlotte se acerca a él
—estaba aburrido porque nada que se moría— continúa hablando el cabecilla —por más que golpeaba a esa zorra, no se moría, pero claro no me servía que muriera a causa de mis golpes y dar sospecha, y menos envenenarla, así que la ahogue, para poder hace...