Capítulo 17.

Él me aseguró que estaba bien y que esa no era su sangre, pero no estaba convencida así que lo mandé a sumergirse en el río mientras yo cerraba los ojos.

¿Cómo mierda había terminado así?

Estaba en mi límite y no hablaba de mi cordura.

Desgarré el dobladillo de mi vestido y tomé un gran trozo. De...