Capítulo 45

Después de la larga charla que tuve con mi papá y una buena noche de sueño, me siento mucho mejor. Al entrar en la casa de mi tío, Tate, el tornado, corría a toda velocidad, dejando migas de galleta en el suelo detrás de él.

—Bella, Ezra dijo que podía tener toda su caja de galletas.

Me reí —Puedo...