Capítulo 28

Sus labios eran suaves, su boca ligeramente ácida. Sabía a deseo y simplemente... dulce.

Tan condenadamente dulce.

El calor se dirigió directamente hacia la ingle de Stefan, la sensación explotando a través de sus nervios. Calor líquido inundó sus venas.

Y Brit...

Su nombre era el único pensamiento ...