La devolución de la inversión

—¿Qué pasa, mi trufa de Transilvania?

—¡VETE AL DIABLO, STERLING!

Sterling sonrió y pellizcó el costado de Demetri. —Oh, sabes que a papi le gusta cuando te pones peleón.

Demetri resopló. Entrando al vestidor, se transformó en murciélago y se probó la ropa que había seleccionado. —Mi inclinación ...