Capítulo 18

—Estás loco... —gemí, siendo apretada en todos los lugares posibles—. Loco...

David rió y mordisqueó mi labio inferior, luego chupó el mismo lugar, y me estremecí recordando exactamente lo que había hecho con mi cuerpo en la casa de mi madre.

—Culpable. —Rompió el beso y me consumió con su mirada ...