4. Estúpido

4. Estúpida

—Natalie—

Ignoro sus llamadas y mensajes por un rato y lloro en silencio en un banco del parque. Algunos chicos de la fiesta se acercan al parque.

—¿No es ella la que estaba besándose con James? —pregunta alguien, lo suficientemente alto como para que yo lo escuche.

—Sí... pero Norris la apartó. ¡Qué pena! Era un buen espectáculo...

—Me pregunto si habría dejado que James se la follara frente a todos si Norris no hubiera interrumpido —dice otro chico y siento que me derrito de vergüenza.

Mientras ese grupo de chicos empieza a caminar hacia mí, le envío un mensaje a Riley para que me encuentre cerca del coche. Me levanto y camino hacia el estacionamiento, tratando de recomponerme y alejarme de esos tipos.

—Podría hacerte pasar un buen rato. ¡Dame una oportunidad! —sugiere un chico, tratando de seguir mi ritmo mientras camino más rápido.

—¿Y nosotros qué? —le pregunta alguien.

—¡Ehmm! Todos podríamos hacer una cadena si ella está de acuerdo.

—¡Solo agárrala! ¿Cuál es el punto de preguntar? ¡Estoy seguro de que estará mojada!

Mi corazón late frenéticamente y casi corro los últimos pasos para no quedar oculta por los arbustos que dividen el parque del estacionamiento.

Me siento un poco mejor al ver a West, Riley y Norris de pie, y los chicos me dejan en paz al notar que ya no estoy sola. Norris se va en cuanto me ve. Riley me abraza y pregunta:

—¿Dónde estabas? Norris dijo que no estabas siendo tú misma...

—No estoy de humor, Riley. Tal vez mañana... —le digo. Al sentarme en el asiento delantero, controlo mi impulso de vomitar. El coche apesta a sudor y sexo. Ojalá no me hubiera enfadado con Norris sin razón. Así podría haber evitado sentarme en este coche o cerca de ambos. West está furioso. Puedo verlo en su rostro. Me pregunto si Norris le habrá dicho algo.

—De todas las cosas en el mundo, Natalie, nunca esperé esto de ti —dice, sacudiendo la cabeza. Ni siquiera estoy segura de a qué se refiere. ¿A que intentara acostarme con alguien mientras estaba borracha o a que deambulara por el parque borracha y sola?

Pero quiero decirle. De todas las cosas en el mundo, yo tampoco esperaba esto de ti, West. Tú acostándote con mi amiga. Al mismo tiempo, no quiero herir a Riley. Ya escupí tanto veneno a Norris, así que mantengo la boca cerrada.

—Déjala primero. Necesito hablar contigo —le digo a West al ver que toma la ruta hacia mi casa. Hay un pesado silencio en el coche. Pero él sigue.

—Te llamé anoche, pero no contestaste —dice después de dejar a Riley.

Me quedo callada.

—Sabes lo difícil que puedes ser a veces. La última vez que no contesté tu llamada, me hiciste pasar un infierno.

No digo cómo me ha estado evitando durante semanas. Ya no importa.

—Y esta noche... ¿Tienes alguna maldita idea de lo que podría haber pasado? Norris te salvó y aún así le diste un mal rato. A veces puedes ser una verdadera perra. ¡¿Lo sabías?!

No puedo quedarme callada más tiempo.

—¿Te refieres a cuando me ignoraste todo el verano y te confronté? ¡Y TÚ... fuiste tú quien me gritó! —ignoro su punto sobre Norris. No dejaré que se centre en mis errores esta noche.

—¡DIOS! ¡No me digas que sigues atascada en eso! —sacude la cabeza—. ¿Sabes qué? Vamos a darnos un descanso de una o dos semanas. Podemos hablar de nuevo cuando puedas pensar con claridad.

Aquí está otra vez. Un ultimátum de tratamiento silencioso. Me lleva a casa en silencio. La tensión entre nosotros es palpable. Pero ya he tenido suficiente. Esto tiene que terminar. Esta noche. Espero hasta que se detiene frente a mi casa.

—Entonces, veo que te gusta ella —finalmente pregunto.

—¿Qué?

—Los vi a los dos en el asiento trasero. Espero que se hayan divertido.

No dice nada. Trato de leer su expresión. ¿Está siquiera avergonzado? Después de todo este tiempo, estuvimos juntos. Compartimos tanto. ¿Cómo pudo simplemente empezar a acostarse con otra persona? ¿Y encima con Riley? Me pregunto si planea jugar con ella también, como lo hizo conmigo.

—Entonces, ¿van a mantener las cosas en secreto o van a hacerlas públicas? —le pregunto, tratando de ocultar el dolor en mi voz.

Suspira.

—Me gusta ella, Nat. Siempre me ha gustado. He estado tratando de decírtelo. Pero sigues mencionando esa maldita pelea —ignora mi pregunta. Pero la realidad me golpea fuerte. Aún lo quiero y me duele que la haya elegido a ella.

Las lágrimas queman mis ojos. Sabía que esto pasaría. Pero aún es difícil creer que me esté pasando a mí en este mismo momento. Fui estúpida al esperar que pudiéramos arreglar las cosas esta noche. Él siguió adelante hace mucho tiempo y yo ni siquiera lo sabía.

De alguna manera logro preguntar sin que mi voz se quiebre:

—Entonces, ¿qué demonios somos nosotros, West?

West gira la cabeza confundido y pregunta:

—¿Qué quieres decir? —Mi corazón se rompe un poco más—. Nunca estuvimos en una relación, Nat. ¿No estaba claro?

Mis mejillas arden de vergüenza y trago con fuerza. ¿Así que todo este tiempo estuve viviendo una ilusión? Sí, no era oficial. Pero no, no estaba claro. ¿Por qué me decía, 'somos mejores que eso' cuando veíamos a otras parejas?

Salgo del coche y corro hacia mi casa. No quiero que me vea llorar. Ya lloré suficiente por él las últimas semanas. Lloré suficiente en el parque esta noche.

Lo sabía.

Sabía que algo estaba mal. Seguí dándome falsas esperanzas.

Fui estúpida. Tan jodidamente estúpida.

Mientras me cambio de ropa, mi cabeza se llena de tantos pensamientos a la vez. «Somos mejores que eso». ¿Porque no estamos en una relación? ¿Es esto lo que quería decirme? ¿Qué somos?

¿Mejores amigos con beneficios?

Cuando mi teléfono suena con su llamada, no puedo evitar romper en sollozos. Soy lo suficientemente buena para compartir todos sus secretos. Lo suficientemente buena para acostarme con él, pero no lo suficientemente buena para una relación. No lo suficientemente buena para que otros lo sepan. Me había dicho que les contaríamos a los demás sobre nosotros después de las vacaciones de verano. ¿Por qué diría eso si no estábamos en una relación? ¿Me estuvo manipulando todo este tiempo?

Me llama varias veces, pero me acuesto junto a mi teléfono y lloro hasta quedarme dormida. No quiero ser manipulada más. No hablaré con él.