CAPÍTULO 80

Antonella no dice una palabra. Levanta su botella de agua y bebe el contenido mientras espera a que me recomponga.

—¿Has terminado? —pregunta con indiferencia.

¿Por qué todos en esta familia son tan insensibles? Ni siquiera se inmuta al verme llorar.

—Sí... sí... Señora, he terminado —balbuceo mient...