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Comenzó a embestir en su boca y gimió, inundándola con su semilla. Regina se atragantó un poco. Uno pensaría que nunca había chupado a uno de los gemelos Strong. Tal vez él llegaba más profundo que ellos. Eran anchos pero no particularmente largos.

—Ah, Regina, eso se sintió tan bien. He tenido esa...