Capítulo veintidós

Sephie

Me encontraba en una casa vieja y familiar, sucia por el abandono. Ese olor a sudor que nunca parecía desaparecer golpeó mis fosas nasales, dándome la náusea familiar que era constante todo el tiempo que viví allí.

No, no, no, no. No puedo estar de vuelta aquí. Me escapé. *Él no pue...