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—¡Vaya! —dijo esa voz familiar, sosteniendo a Nel para que no tropezara hacia atrás.

—¡Liam! —dijo Nel con sorpresa. Inmediatamente sintió mariposas en el estómago—. Hola, yo... no esperaba verte más hoy.

—Bueno, como este es uno de mis lugares favoritos para pasar el rato ahora, creo que me verás...