8. La conspiración

Leila se giró y vio a un grupo de personas sosteniendo bandejas de comida y jarras llenas de líquido. Su piel brillaba con un tono plateado bajo la luz del sol. Vestían túnicas blancas atadas con fajas plateadas. Cada uno llevaba una pila de finas pulseras doradas en ambos brazos. El hombre que le g...