Capítulo 67: Marvin

Marvin

Nos costó mucho esfuerzo y gritos llegar allí, pero finalmente logré arrastrar a la chica a la oficina del club.

—P-por favor, no me mates. T-te prometo que e-e-esta es mi primera vez —suplicó por su vida, con lágrimas corriendo por su rostro. Por un segundo, comencé a sentir lástima por el...