No dejes mi vista

—Maldita sea. Siéntate.

Su orden la obligó a sentarse, su cuerpo temblando. Estaba enojado, eso lo podía notar. Xavier nunca le había levantado la voz de esa manera, nunca la había mirado como lo hacía ahora y solo el pensamiento de eso era suficiente para hacerla temblar por completo.

Xavier se a...