Capítulo 17: SI DE VERDAD ME AMAS

Cuando Christopher llegó a casa, pasó de largo junto a Maggie, quien ronroneaba y lo seguía a sus pies. Suspiró y luego se agachó para acariciarle suavemente las orejas.

—Lo siento, Mags. No estoy enojado contigo —ella se inclinó hacia sus dedos, contenta—. ¿Me extrañaste, chica? —Se levantó y colo...