Capítulo 467 Razón

El aliento de Brad era caliente y pesado, flotando a solo unos centímetros de mis labios, como si intentara arrancarme el alma.

—No te preocupes por eso; solo concéntrate —dijo.

Pero el teléfono no dejaba de sonar, una llamada terminaba y otra comenzaba de inmediato.

El tono de llamada me estaba ...