Capítulo 151: Destino

Arrastré un pequeño taburete redondo hasta la cabecera de la cama de Daniel, tratando de averiguar qué demonios decir y por dónde empezar.

Solía pensar que dieciocho años era mucho tiempo, pero ahora, a los veintidós, sentía que no había mucho de qué hablar.

—Daniel, ¿cómo te convertiste en un cob...